INE, el nuevo partido político
El INE favorece los intereses de la derecha mexicana.
Nació de un fraude, como respuesta al clamor popular que exigía elecciones limpias. Su padre, Carlos Salinas de Gortari. El Instituto Federal Electoral se creó a raíz del conflicto electoral de 1988, en el que Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, candidato del Frente Democrático Nacional se perfilaba como el ganador horas antes de los resultados oficiales. Pero ante una "misteriosa" caída del sistema, la victoria se la llevó Salinas de Gortari, el opositor.
Posteriormente, el gobierno salinista se negó a aceptar los cargos populares tanto de Acción nacional como del PRD, con Vicente Fox en Guanajuato y Cristóbal Arias en Michoacán.
Para el inicio del milenio, la transición con la que el PRI se retiraba de la silla presidencial luego de casi 70 años, significó para muchos el inicio de una era correcta y democrática, en la que finalmente en muchos años, se avanzaba a una democracia plural, dejando atrás el llamado “dedazo” y en la que inició una nueva generación de políticas. En 2006, se dieron las elecciones más cerradas de la historia democrática en México. El candidato del PAN, Felipe Calderon Hinojosa (35.91 %), aventajaba con una ínfima diferencia a Andrés Manuel López Obrador (35.29 %), candidato del PRD. Los resultados oficiales colocaron a Calderón como el ganador. Años después el consejero presidente del IFE confirmó el fraude. Tanto en 1988 como en 2006 el país pedía un cambio inclinándose por la izquierda mexicana; hoy las encuestas favorecen de nuevo a la izquierda y de nuevo se ven en riesgo los intereses de los partidos “dinosaurio”. La democracia no es la que está en riesgo, son los intereses de grupos selectos que se beneficiaron de los comicios y del ejercicio del poder.
México tiene una vergonzosa historia de fraudes electorales, todos ellos avalados por el INE, órgano constitucional que actualmente enfrenta una dura batalla contra el partido del presidente. A toda costa, el órgano electoral ha intentado disminuir la preferencia del electorado hacia ellos. Nunca, nunca en su historia había intentado que un partido disminuyera el número de diputados de representación proporcional. Ahora presentó nuevas reglas para que no exista sobrerrepresentación en la cámara de diputados; a pesar de no tener facultades. Sólo como dato: el PRI tuvo exceso de representación en 2012 y 2015 así como el PAN en 2000, 2003 y 2009. ¿Y el INE?
Retiró 42 candidaturas a Morena, supuestamente por no presentar gastos de precampaña. Esto no sucedió con otros partidos que tampoco presentaron informes de dichos gastos. El ejemplo está en el candidato de Movimiento Ciudadano por la gubernatura de Nuevo León: Samuel García, quien, según datos de la fiscalía, ha rebasado el tope de gastos de campaña. Tampoco retiró la candidatura a Maru Campos del PAN, en Chihuahua, quien se encuentra vinculada a proceso por lavado de dinero y lazos con el narcotráfico. Así podría seguir con una larga lista de candidatos de oposición.
El INE favorece los intereses de la derecha mexicana. Eso es evidente. Está tomando partido y tomando facultades que no le pertenecen. Así que sí, este año nace un nuevo partido político: El Instituto Nacional Electoral.