Tuvalu, un país en peligro de extinción

Lo que sucede con Tuvalu va más allá de la extinción. Mientras lees este artículo, 12,000 personas se encuentran del otro lado del mundo luchando contra las barreras de la adversidad, intentando alzar una voz que nuestra indiferencia les ha arrebatado. 

¿Alguna vez te has imaginado qué pasaría si el lugar al que llamas hogar  desapareciera de la faz de la tierra? ¿Estarías dispuesto a dejar todo lo que conoces por una situación que no puedes controlar? Me gustaría poder decir que estas preguntas son meras suposiciones, construcciones ficticias; sin embargo, existen personas que desde hace más de 50 años se han tenido que plantear estas preguntas y han tenido que enfrentarse a la realidad. Conozcan a Tuvalu, el país que se encuentra al borde de la extinción gracias a la falta de acción humana. 

Tuvalu es un país insular perteneciente al continente de Oceanía ubicado en el Océano Pacífico, a medio camino entre Australia y Hawaii. Cuenta con diversos récords, entre ellos el del país menos visitado y el del cuarto país más pequeño del mundo. Además de aquello, es uno de los países con mayor densidad de población (teniendo alrededor de 12,000 habitantes en un área de aproximadamente 26 km cuadrados), y ocupa el primer lugar en los países con menor desarrollo y crecimiento económico (PBI) de Oceanía (con un valor neto de 36 millones de euros). El récord más alarmante de Tuvalu es –sin duda– el de ser el país que muestra mayor afectación por el cambio climático. Debido al aumento del nivel del mar (creciendo cuatro milímetros más cada año), la nación tiene una estimación de vida insular menor a los 50 años si no se lleva a cabo una toma de acción eficaz, según la comunidad científica de la Organización de las Naciones Unidas. 

Las condiciones climáticas extremas en la región han tenido un gran impacto en la vida de la gente de Tuvalu.. Las grandes masas de agua salina que se azotan contra las islas inundan casi toda la superficie terrestre, ocasionando que gran parte del terreno no sea cultivable y que, por lo tanto, no se obtengan los recursos alimenticios y económicos necesarios para el desarrollo de sus ciudadanos (Tuvalu debe importar casi todos sus recursos de otros países, entre ellos China, Australia, Corea del Sur, Nueva Zelanda y Chile). El “Pulaka” es una planta comestible de la familia del taro y originaria de Tuvalu, muy importante para su cultura. Gracias al clima variable y a la contaminación de salinidad que posee el territorio, es difícil actualmente que el cultivo se desarrolle. Lo más lamentable es que Tuvalu no solo está en riesgo de perder su fruto más característico, pero que si no actuamos pronto, el país entero perecerá.

Foto: Ishan @seefromthesky

Foto: Ishan @seefromthesky

Las afectaciones a la infraestructura en Tuvalu son graves. Al encontrarse los atolones prácticamente sobre el nivel del mar y siendo su punto más alto 5 metros, todas las viviendas se encuentran amenazadas por las constantes inundaciones. Los esfuerzos de los ciudadanos por conservar sus viviendas ejemplificados por las barreras hechas de roca o sacos de arena apilados, no han garantizado medidas de protección sólidas. Esto ha ocasionado que se tengan que importar cada vez más materiales de construcción, estos representan el 30% de las importaciones totales del país (alrededor de 10 millones de dólares al año). 

Por otra parte, la sobrepoblación, el atraso económico, la pobreza y la falta de recursos ocasionan que más de la mitad de la ciudadanía no tenga los ingresos necesarios para poder satisfacer el costo de los servicios básicos (agua, electricidad, educación, sustento y esparcimiento). Cabe mencionar que el sistema social y cultural de Tuvalu, en el que –por falta de territorio– alrededor de 15 habitantes comparten una misma vivienda, comienza a desmoronarse a medida que la demanda de ingresos influye en el país. 

Además, Tuvalu ocupa el segundo lugar en los países con menor desarrollo económico en todo el mundo (después de Somalia) con un valor neto de 36 millones de euros, y un ingreso de 3,134 euros per cápita al año. La economía se sostiene por cinco pilares principales: la venta de estampillas y sellos con bocetos de aspectos típicos del país; la adquisición del dominio “.tv”; la pesca (ocupa el 50% del total de exportaciones del país, obteniéndose aproximadamente 2 millones de dólares); la ganadería de cerdos y aves de corral; y el turismo. 

Lo que sucede con Tuvalu va más allá de la extinción. Mientras lees este artículo, 12,000 personas se encuentran del otro lado del mundo luchando contra las barreras de la adversidad, intentando alzar una voz que nuestra indiferencia les ha arrebatado. 

‘Saving Tuvalu’ es una campaña humanitaria global cuyos principales objetivos han sido alzar la voz ante la situación; implementar estrategias que proporcionen ayuda directa al país; y –sobre todo– buscar que la gente entienda las raíces del problema y que contribuya adquiriendo hábitos responsables en relación con el medio ambiente. Existe un problema que sigue desviándonos de cumplir los objetivos: la falta de acción. Por eso es que recurro a ti, lector. Tú, que tienes la fortuna de no tener que preocuparte porque el lugar al que llamas hogar desaparezca. Dejemos de perder batallas contra nosotros mismos. Si Tuvalu se hunde, el mundo se hundirá con él también.

Link Saving Tuvalu (Instagram): https://www.instagram.com/savingtuvalu/




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